En primer lugar he vuelto a hacer deporte, he buscado un momento del día que sea factible para mí y he comenzado a correr. A las 20:30 de la noche ya no hace tanto calor y corro por la playa terminando con un buen baño en el mar.
Tres días antes de volver comenzaré a levantarme a las 8:30 de la mañana para que cuando vuelva coincida con el horario que tengo de levantarme cada día.
He comenzado a moderarme en las comidas y aún lo haré conforme vaya llegando el 31 de agosto. Por las noches sólo y exclusivamente fruta y desayunos fuertes; poco a poco iré moderando los desayunos y seguiré con la fruta en la cena.
Volveré a programar en el móvil las tareas que tengo pendientes para septiembre.
A día de hoy sigo mirando mis metas, releyéndolas, actualizándolas ya que septiembre es un período parecido a la navidad por aquello de un ciclo nuevo. Volvemos con nuevas ganas, nuevas ideas y ahora es un buen momento para que cuando lleguemos a casa las retomemos con nuevas ganas.
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